¿QUÉ HACER SI MUERE UN FAMILIAR?

Uno de los momentos más duros de la vida es cuando muere un familiar. A pesar del estrés y el dolor que nos embargan, es necesario encargarse de ciertos trámites. De no hacerlo podríamos vernos inmersos en un perjuicio económico o legal, que es lo que menos queremos en esos momentos tan traumáticos.

Si no tenía contratado un seguro de decesos, debemos gestionar la muerte de un familiar por nuestra cuenta. Estos son los pasos necesarios:

Muerte de familiar: certificado de defunción

El certificado o partida de defunción es un documento imprescindible tras la muerte de un ser querido la extinción de todas las relaciones jurídicas de las que era titular: propiedad y usufructo de bienes, contratos bancarios, de arrendamientos, de suministros de la vivienda, de trabajo si aún estaba en periodo laboral o de extinción de la pensión de jubilación. Su obtención se gestiona en el Registro Civil, donde es necesario inscribir el fallecimiento. Es importante no confundir este documento con el certificado médico de defunción, expedido por un médico colegiado, que es donde se certifica la causa de fallecimiento y es necesario para acreditar la muerte del familiar en el Registro Civil.

La partida de defunción es necesaria para cualquier otro trámite que queramos llevar más adelante y que veremos en este artículo, como el certificado de últimas voluntades, la solicitud de pensiones, la adjudicación de herencias, etc. El certificado de defunción precisa de ciertos datos, como la hora de defunción, el certificado expedido por el médico y los datos del solicitante.

El acta de defunción la expide el mismo Registro Civil en un plazo de entre ocho y doce días, pero inmediatamente se dará licencia para la inhumación o incineración, para la que hay que esperar un mínimo de 24 horas desde la muerte del familiar. Además, se comunicará a los servicios de Seguridad Social y demás instituciones oportunas el fallecimiento del ser querido. El siguiente paso será comunicar el fallecimiento a la Seguridad Social. Hay dos formas de dar esta información.

Una es presencialmente, a través de sus Centros de Atención, solicitando una cita previa. La otra es la a través de la Sede Electrónica, en su página web.

Muerte de familiar en hospital

Si el familiar fallece en el hospital, será un médico del establecimiento el que certifique la defunción, y el hospital se encargará de entregar el certificado a la familia. La responsabilidad de la inscripción del fallecimiento recae tanto el los familiares como en la dirección del lugar donde se haya producido la muerte.

Orden judicial (en muertes judiciales)

En el caso de una murete judicial, que requiera una investigación penal debido a una muerte violenta, será la misma orden la que equivalga al certificado médico de defunción, y la necesitaremos para la inscripción en el Registro Civil.

A continuación hay que obtener el certificado de últimas voluntades, donde se da constancia de si el fallecido ha otorgado testamento y, en consecuencia, de la disposición de bienes tras su muerte. Este documento hay que solicitarlo tras 15 días hábiles después del fallecimiento y se obtiene en el Ministerio de Justicia, donde también nos proporcionarán un certificado de seguros de fallecimiento.

Dicho certificado sirve para conocer la existencia de posibles pólizas -seguros de vida, seguros de decesos…- que hubiera contratado el fallecido, así como la entidad aseguradora contratante. La obtención de estos certificados suele gestionarse en un plazo de, como máximo, una semana.

Tras este paso, hay que proceder a la apertura del testamento. Para ello, hemos de solicitar su copia al notario encargado del mismo, cuya identidad figura en el certificado de últimas voluntades. Una vez obtenida la copia, se procede a la lectura notarial y el reparto de la herencia. También se comprueba si los herederos, bien sean el cónyuge o los hijos, tienen derecho a obtener una pensión de viudedad u orfandad, respectivamente. De ser así, se procede a su tramitación. Los trámites para la obtención de la pensión se hacen en los Centros de Atención de la SS, al igual que los de auxilio, subsidio, prestación familiar y orfandad.

Muerte de un familiar sin testamento

En caso de que el fallecido no haya otorgado testamento, debe hacerse Declaración de Herederos ante notario, mostrando el certificado de defunción, el de últimas voluntades, si lo hubiere, y el certificado de nacimiento de todos los herederos. En esta declaración, es la propia ley y el Código Civil los que establecen quiénes son los herederos y cómo corresponde el reparto de la herencia.

La adjudicación de los bienes tras la muerte de un familiar

Una vez se concretan los herederos y el inventario de bienes del fallecido, corresponde la adjudicación de los mismos a través de su aceptación y, si hubiere varios herederos, de su partición. Los herederos pueden acordar una disposición distinta de los bienes, pero esto derivaría en un complejo proceso fiscal, por lo que no es recomendable.

Liquidación de impuestos

Los siguientes pasos serán la liquidación del Impuesto sobre Sucesiones, la liquidación de la Plusvalía Municipal de los inmuebles heredados, la inscripción de la adquisición en el Registro de la Propiedad, la liquidación y cancelación de las cuentas corrientes y productos financieros de los que era titular el fallecido, cambios de la titularidad de contratos, etc. Cabe destacar que la declaración del Impuesto de Sucesiones debe realizar tras 6 meses del fallecimiento.

Inscripción en el Registro de Propiedad

El heredero de un bien inmueble no lo es de forma oficial hasta que este está inscrito a su nombre en el Registro de la Propiedad. Por tanto, es necesario ese cambio de titularidad de los bienes inmuebles, para el que se requiere la escritura del inmueble y la escritura de herencia.

Gestión del seguro de decesos

¿Sabías que no tienes por qué encargarte de toda esta burocracia? Si tienes contratado un seguro de decesos, una aseguradora se encargará de la gestión y tramitación administrativa tras la muerte del asegurado. De esta forma se agiliza el proceso y los familiares no tienen que encargarse de la burocracia en estos momentos tan difíciles. Puedes encontrar tu seguro ideal usando nuestro comparador de seguros. Los seguros de decesos Santalucía son los que más experiencia tienen en la gestión burocrática de un sepelio, aunque hay productos muy interesantes como el seguro de decesos DKV o el homónimo de Helvetia.